Primero, la falda. La
deslizas lentamente por mis muslos y dejas que caiga groseramente al
suelo, arremolinándose entre mis pies. Sigues con los botones de la
blusa, sin prisas, uno a uno, mientras miras mis ojos. Ahora son mis
brazos los que arrancas, con un movimiento brusco. Para terminar, me
quitas la cabeza. Esta temporada están de moda las morenas.
Rosa M.
Vaya, parece que Pigmalión ha cobrado consciencia.
ResponderEliminarUn saludo
JM
je, je, je. Se trata de uno de esos micros con un título que pasa desapercibido y finalmente vuelves para redondear la comprensión del texto.
ResponderEliminarMe ha gustado.
Un beso.
Ser maniquí parece que no es un oficio agradecido... hay que tratarlos con delicadeza y mino... eso de quitarle la personalidad según las modas uf, parece tan cruel...
ResponderEliminarBesos :)
Mucha sensualidad... y para terminar, el desencanto.
ResponderEliminarBesicos, amiga.
El final, de rechupete Rosa. Me ha encantado el giro.
ResponderEliminarUn beso
¡Qué bueno! Qué macabro...Muy de Buñuel.
ResponderEliminarUn beso.
De rbote de ENTC que me ha encantado tu relato de MATIAS y por qaquí me quedo.
ResponderEliminarInvitada quedas a
montesinadas.
http://montesinadas.blogspot.com.es/
Pasan de moda nuestros accesorios, pasamos de moda nosotros, dónde iremos a parar, je je, suerte que las modas siempre vuelven.
ResponderEliminarBesos al aire Rosa.
Aunque con el título nos avisas, ese comienzo erótico me engaña y su final me sorprende.
ResponderEliminarUn beso
Hoy en día, aún tratan así a las mujeres, como si fueran maniquís. Y a los maniquís hay que tratarlos con dulzura... vamos... digo yo.
ResponderEliminarBesos
Pues tal vez no vayas tan desencaminada, cuando esos brazos no tienen a quien abrazar y cuando pierdes la cabeza por que él no te quiere rubia.
ResponderEliminarBesos muchos ♥♥♥
Vengo poco, pero cada vez que me doy una vuelta confirmo que lo estás haciendo de maravillas, un avance que sorprende.
ResponderEliminarUn beso.
HD